jueves, 21 de mayo de 2009

TRABAJO COLMENAR DE OREJA

INDICE DEL TRABAJO

1. OBJETIVOS

2. METODOLOGIA

3. PRESUPUESTOS TEORICOS Y METODOLOGICOS

LOS ESPACIOS RURALES EN MUTACION

ELECCION DE CASOS TIPO

SITUACION DE COLMENAR DENTRO DE ESTA TIPOLOGIA


4. CARACTERISTICAS GENERALES DEL TERRITORIO

4.1. LOCALIZACION-SITUACION

4.1.1. Con respecto a la Comunidad Autónoma de Madrid
4.1.2. Con respecto a la Comarca de las Vegas
Cercanía a la capital
Cercanía a la carretera nacional III

EL MEDIO NATURAL COMO UN ACTIVO
Topografía y localización de los núcleos y municipios
Condiciones agronómicas en relación con el clima, orografía, edafología e hidrografía
4.2.2.1. Clima
4.2.2.2 Orografía
4.2.2.3 Edafología
4.2.2.3 Hidrología
Elementos del medio natural y atracción turística


5. CARACTERIZACION SOCIOECONOMICA DEL TERRITORIO

5.1. POBLACION: EVOLUCION Y CARACTERISTICAS GENERALES

5.1.1. Evolución de la población de Colmenar de Oreja
5.1.2. Dinámica natural de la población
5.1.3. Movimientos migratorios
5.1.4. Síntesis de la dinámica demográfica reciente en Colmenar
5.1.5. Características residenciales en el municipio

5.2. ECONOMIA Y DESARROLLO RURAL

5.2.1. El estado de las comunicaciones y los equipamientos de transporte
5.2.2. Base económica del territorio y diversificación de las actividades
5.2.2.1 Sectores económicos predominantes. Distribución geográfica general de las actividades en el municipio
5.2.2.2. El sector primario
5.2.2.3. Sector secundario
5.2.2.4. Sector terciario
5.2.2.5. Proyección de la agricultura en Colmenar de Oreja y el papel de la agroindustria
5.2.2.6. Turismo rural en Colmenar de Oreja
5.2.3. Desarrollo urbanístico
5.2.4. Cambios producidos en la comarca de las Vegas tras la entrada en la UE


6. ELEMENTOS DEL PAISAJE RURAL EN SU COMPONENTE AGRARIA. ANALISIS EVOLUTIVO

6.1. LA ESTRUCTURA AGRARIA
6.1.1. Nivel técnico
6.1.2. Vinculación a la tierra y formas de explotación
6.1.3. Tipos de explotación
6.1.4. Formas de explotación
6.1.5. Tamaño económico de las explotaciones
6.1.6. Ganadería

6.2. EL SISTEMA AGRARIO
6.2.1. Factores que configuran el sistema agrario
6.2.2. Elementos que caracterizan del sistema agrario

6.3. EL PAISAJE AGRARIO
6.3.1. El ager o espacio cultivado
6.3.1.1. Entramado parcelario: fronteras parcelarias, tamaño de las parcelas, forma y distribución territorial del ager
6.3.1.2. Tipos de cultivos
6.3.1.3. Posibles relaciones de las características del ager con el medio físico y con los procesos históricos en el territorio
6.3.2. El saltus o espacio no cultivado (bosques, pastizales y prados)
6.3.2.1. Extensión del saltus
6.3.2.1. Morfología
6.3.3. Hábitat y poblamiento
6.3.3.1. Tipo de hábitat
6.3.3.2. Emplazamiento de los núcleos
6.3.4. Red de caminos, transportes y vías pecuarias

7. CONCLUSIONES. TIPIFICACION DEL ESPACIO


1. OBJETIVOS.
Los objetivos a seguir con el trabajo a realizar serán:
a) Poder reconocer un espacio rural en sus diversos componentes dentro de los municipios de la Comunidad de Madrid.
b) Saber relacionar los aspectos teóricos de la geografía rural tratados en el aula, con respecto al trabajo de campo del municipio objeto de análisis a continuación.
c) Conocer y manejar algunas de las fuentes fundamentales para el estudio de los espacios rurales.


2. METODOLOGÍA.
La metodología a seguir será el método hipotético-deductivo, es decir, partiendo de unas hipótesis de carácter general sobre los espacios rurales (espacios rurales en mutación) y sobre el tipo de espacio rural al que pertenece nuestro municipio objeto de estudio, elaboraremos predicciones de fenómenos individuales, para nuestro caso, con respecto al municipio de Colmenar de Oreja.
Para ello, el cuerpo del trabajo nos servirá para elaborar unas conclusiones y a su vez, poder afirmar si Colmenar de Oreja se incluiría dentro de las características nombradas a continuación, o si por el contrario en nuestro municipio tuviesen lugar otros fenómenos que se escapan a nuestras hipótesis de partida.

3. PRESUPUESTOS TEÓRICOS Y METODOLÓGICOS.

LOS ESPACIOS RURALES EN MUTACION
Desde el ámbito económico, la OCDE plantea que las transformaciones recientes de los espacios rurales se deben a los cambios producidos en la economía internacional como es el surgimiento de la globalización, la mejora en las comunicaciones y la reducción de los costes del transporte, así como las nuevas normas que rigen el comercio de bienes. Todo esto, ha fomentado la aparición de importantes actividades no agrarias en las regiones rurales, las cuales a pesar de quedar rezagas en términos agregados con respecto a las medias nacionales, se consolidan en muchos de los casos como las regiones con mayor tasa de creación de empleo.
Esto se debe a que los activos de estas regiones y la mejora de los enlaces de transporte y las infraestructuras han contribuido a retener y atraer a la población y a las empresas, ya que la facilitación de los desplazamientos entre distancias de mayor amplitud ha ampliado la esfera de influencia de las principales zonas urbanas, permitiendo que la población resida en regiones rurales y trabaje en las ciudades. Activos rurales como la calidad de vida y el medio ambiente, el legado natural y otras ventajas son objeto asimismo de una mayor demanda que ha contribuido a una inversión a la tendencia de la emigración.
Con ello, aunque la agricultura desempeña un papel importante dentro de estos ámbitos territoriales, su peso en las economías rurales suele ser escaso y tiende a la baja. Sin embargo, a pesar de este descenso, la agricultura sigue ejerciendo una importante influencia en la economía rural, en ciertos aspectos de manera complementaria a otras actividades, y en otros, de modo más competitivo. La OCDE, pone el ejemplo de que una agricultura, y en particular una agricultura productiva, puede ser un importante comprador de insumos locales, y no sólo en relación con la explotación agraria, sino también con los servicios empresariales. Pudiendo suministrar así mismo, productos a los sectores locales de fabricación como son las empresas agroalimentarias, y contribuir a la dotación de ciertos bienes públicos o semipúblicos.
Quizá otro factor importante, como apunta la OCDE, consista en que las familias agrarias cada vez tengan más ingresos ajenos a la explotación agraria, lo que propicia que estos hogares rurales se interesen por la diversificación de la economía rural en nuevos sectores.
Con respecto a esto, tiene que ver la gestión rural de los recursos naturales, los cuales cada vez van teniendo mayor importancia debido al valor creciente que otorga la sociedad (tanto rural como urbana) a los activos naturales y culturales de estos espacios rurales, los cuales poseen algunas de las más importantes antigüedades, lugares históricos y otros activos de índole recreativa. Por ello, todas estas características que reúnen los espacios rurales serán de vital importancia para el desarrollo y diversificación de sus economías.
Todos estos cambios recientes que se observan en las regiones rurales, también han provocado transformaciones en la política rural de la OCDE, con un cambio de paradigma en el terreno de la política regional, pasando de una estrategia de “arriba a abajo” basada en las subvenciones, a la adopción de políticas diseñadas para mejorar la competitividad de las zonas rurales a partir del desarrollo endógenos del medio, para lo cual se creó la iniciativa comunitaria LEADER.
Este nuevo enfoque territorial a escala local ha contribuido a promover la colaboración público-privada y a concebir a las regiones rurales como activos económicos en colaboración con las áreas urbanas y no como zonas atrasadas.
Desde el ámbito político, la Ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, enfoca la visión del mundo rural a través del nuevo paradigma, en el que el territorio adquiere un significado central dejando de ser un elemento pasivo.
También afirma como ha cambiado la percepción de lo rural, debido a que estos espacios se encuentran actualmente en un proceso de reestructuración que pasa por la modernización de sus estructuras económicas, sociales y ambientales. Estos procesos, permiten vislumbrar además la aparición de territorios rurales que compartan rasgos de vida urbana, como equipamientos, infraestructuras de transporte, opciones de empleo cada vez más diversificadas, oferta cultural, etc.
Por otra parte, estos procesos también aligeran a la metrópoli de sus crecientes problemas de congestión, los cuales se podrían aliviar apostando por resolver primero los problemas rurales. Por ello, la complementariedad del espacio rural y urbano en un mismo territorio es lo que creará sinergias que multipliquen los resultados de desarrollo deseado para ambos. Esta complementariedad entre territorios es la que está dando lugar a flujos de población bidireccionales: Por una parte, la aparición de nuevos pobladores, los neorrurales, que aportan rentas y conocimiento nuevo al medio rural, lo que les convierte en potencial de desarrollo; y por otra parte, existe un importante proceso por el que se amplían las áreas de influencia en las pequeñas ciudades de los territorios rurales, en las que los trabajadores diferencian el centro de trabajo, dentro de ellas, y el de residencia, en el medio rural puro. A ello, ayudan principalmente unas infraestructuras de comunicación viaria más ágiles o la creciente importancia de las redes de comunicación e información de base tecnológica.
Gracias a estas últimas, la industria o el comercio de base rural pueden tener acceso a mercados especializados de cualquier otro territorio o incluso a cualquier rincón del planeta, pero en la medida en que su población y sus empresas hayan accedido a la sociedad de la información y sus productos sean innovadores y competitivos.
Igual ocurre con el turismo rural o de naturaleza, el cual no se concebiría sin que sus empresas se integren en el mismo plano tecnológico que las grandes agencias de viajes.
Un factor esencial del desarrollo rural lo constituye, por tanto, la capacitación profesional, técnica y empresarial que estimule y posibilite la adopción de iniciativas innovadoras. En este sentido, la actualización de conocimientos del capital humano, proporcionan cada vez más peso al sector industrial (y especialmente a la agroindustria), o al sector terciario.
Por ello, el apoyo a la innovación, al I+D+I, forma parte de las prioridades del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el cual ha dotado de infraestructuras que permitan el acceso a internet.
Por otro lado, la Ministra afirma que el sector agrícola ha sido uno de los primeros en secundar los impulsos de modernización y de apoyo a la innovación tecnológica, como es el caso de las nuevas formas de producción ecológica y en la apuesta por la calidad así como la optimización y ahorro de agua. En el caso del agua, se ha llevado a cabo una intensa modernización de los regadíos, al introducir sistemas óptimos de distribución y aplicación del agua, con sistemas de control informatizado de los mismos, y consiguiendo con ello no sólo ahorros de agua sino también importantes reducciones en la utilización de fertilizantes.
Por último, otro de los hechos que destaca la Ministra es que la agricultura por sí sola ya no puede asegurar un medio rural dinámico que sea capaz de seguir proporcionando la multiplicidad de bienes y servicios que la sociedad demanda, aunque también sucederá a la inversa: sin una actividad agraria eficiente y sostenible, estos objetivos tampoco serían posibles en una gran mayoría de los territorios rurales españoles.
Por tanto, es esencial tratar convenientemente el binomio agricultura-medio rural, para llegar a un equilibrio inteligente.
Desde el ámbito académico, el Coloquio Hispano-Francés de geografía rural da una visión sobre como repercuten los espacios naturales protegidos en los núcleos rurales, en los cuales la crisis de la agricultura y de las sociedades tradicionales que los habitaban trajeron consigo un paulatino abandono que ha permitido una recuperación como lugares más “naturales”.
Para el momento actual, uno de los conceptos que señala es la naturbanización del entorno de los parques naturales, entendida como el fenómeno de difusión territorial de las actividades urbanas en las áreas rurales remotas. Este nuevo concepto de urbanización se entiende como un hecho positivo siempre que propicie el desarrollo local y el equilibrio del territorio.
Otro hecho señalado es que el futuro de la actividad agrícola en las áreas naturales protegidas se basa en una apuesta sobre las denominaciones de origen y la agricultura ecológica, es decir, sistemas productivos más extensivos a la vez que menos contaminantes.
Por último, también se afirma que las actividades económicas de los municipios situados en espacios protegidos han tendido a la disminución de las actividades agrarias y al aumento de los servicios, generados por el turismo, e incluso se han ampliado algunos núcleos urbanos como consecuencia de la llegada de habitantes que proceden de municipios limítrofes.

ELECCION DE CASOS TIPO SEGÚN EL TEXTO DE URZAINKI.
Como tipología de espacio rural hemos elegido los espacios periurbanos cuyas circunstancias vienen determinadas por la proximidad espacial a la ciudad que tiene una dinámica expansiva y constituye un importante centro que concentra demandas, oportunidades, etc.
Sus rasgos principales son: competencia fuerte en los usos del suelo, especulación, desarrollo de funciones nuevas, desarrollo de equipamientos para el espacio rural pero al mismo tiempo carencias de servicios locales porque es asistida desde el centro urbano. Los centros de estas características se ven afectados por modificaciones de los usos tradicionales: agricultura progresiva muy capitalizada e intensiva en energía y a la vez abandono de baldíos por expectativas nuevas en el uso del suelo. Con lo que hay contradicciones y áreas diferenciadas, es decir, zonificación.
SITUACION DE COLMENAR DE OREJA DENTRO DE LA TIPOLOGIA DE ESPACIOS RURALES. (hipótesis de partida)
Nuestro municipio objeto de estudio, como ya se ha mencionado antes, es Colmenar de Oreja, el cual hemos englobado dentro de la tipología de espacio periurbano. Nuestra hipótesis de partida para referirlo a dentro de esta categoría, se basa esencialmente a su cercanía con respecto a la metrópoli madrileña, la cual como indica Urzainki, tiene una gran dinámica expansiva generando una amplia área de influencia.
Sin embargo, a su vez, y partiendo de un desconocimiento específico del municipio a estudiar, pensamos que Colmenar de Oreja tiene una gran dependencia con respecto a la metrópoli madrileña y por ello, no se consolida como un municipio dinámico cuyo desarrollo se base tan sólo en sus recursos endógenos.
Además esta cercanía con Madrid capital también obliga al municipio a diversificar sus actividades económicas para así, fomentar un vínculo más estrecho con la ciudad, lo cual requeriría una fuerte competencia en los usos del suelo. Mientras, las actividades económicas tradicionales, como es el caso de la agricultura requieren sistemas de producción cada vez más intensivos para que esta actividad pueda subsistir, debido a las escasas rentas que genera.
Con todo ello, pensamos que Colmenar de Oreja sería un puente entre lo urbano y lo rural/natural, lo cual puede asimilarse como una valoración ambiental positiva, es decir, entendida como un espacio liberador o bien como una valoración negativa de agresión al espacio rural por parte de la ciudad. Esta también será una de las cuestiones que analizaremos, una vez recopilada toda la información a cerca del municipio: ¿A quién beneficia más está relación rural-urbano?

4. CARACTERISTICAS GENERALES DEL TERRITORIO

LOCALIZACIÓN-SITUACIÓN.

4.1.1 Con respecto a la Comunidad Autónoma de Madrid.
Colmenar de Oreja se sitúa al sureste de la Comunidad de Madrid, en la meseta hidrográfica de los ríos Tajo y Tajuña, a los 40º 07' 00" de latitud Norte y los 5º 47' 30" de longitud Este, del meridiano de Madrid.


Con respecto a la Comarca de las Vegas.
Dentro de la Comarca de las Vegas Colmenar de Oreja se ubica en la zona suroeste limitando por el norte con los términos municipales de Valdelaguna, Chinchón y Villaconejos; por el sur, con la provincia de Toledo y los términos de Villarrubia de Santiago, Noblejas, Oreja, Ocaña y Aranjuez, en la divisoria de aguas del río Tajo; al este, con los de Belmonte del Tajo, Villarejo de Salvanés y Villarrubia de Santiago, y al oeste, con el término de Aranjuez.

Cercanía a la capital.
El municipio de Colmenar de Oreja se encuentra a 50 Km. de distancia de Madrid capital. Colmenar de Oreja actualmente sólo tiene acceso por carretera, aunque antiguamente tenía estación de tren, ahora está en desuso. Sin embargo, en el trazado de la antigua línea del tren de Arganda está la actual Vía Verde del Tajuña.
Se accede en automóvil desde la capital por la autovía de Valencia, la A-3, tomando el desvío de la M-404 a la altura del kilómetro 50 en Villarejo de Salvanés hasta Belmonte de Tajo y desde allí por la M-311, hasta Colmenar de Oreja.
Otra ruta posible es desde la A-3 por la M-307, en el kilómetro 21, poco antes de llegar a Arganda del Rey, siguiendo por ella se toman sucesivamente la M-311 y antes de Morata de Tajuña la M-313 hasta Chinchón y Colmenar de Oreja.
Por último existe la posibilidad de llegar por la A-4 hasta Aranjuez, allí, tomar la M-305 y el desvío poco después de la M-318 directa hasta Colmenar de Oreja.
Sin embargo, como se puede comprobar no hay un acceso directo por autopista para llegar al municipio sino que hay que tomar carreteras comarcales.
También se puede ir con los servicios regulares de autocar, desde Madrid la línea 337 (Conde de Casal). Madrid-Chinchón-Valdelaguna o la línea 415A (por Pinto), con la compañía LA VELOZ; y desde Aranjuez la línea 430: Aranjuez-Villarejo de Salvanés, con la compañía AISA.

Cercanía a la carretera nacional III.
Colmenar de Oreja se encuentra a unos 27 Km. de la N-III, siendo sus accesos hacia esta autopista a través de carreteras comarcales, las más próximas la M-311 y la M-404. Como se pude observar en el mapa, a continuación
EL MEDIO NATURAL COMO UN ACTIVO.

Topografía y localización de los núcleos y municipios.
En cuanto a la localización de los núcleos con respecto al entorno natural, Colmenar de Oreja se situaría en el páramo en donde predominan las llanuras tabulares rematadas en caliza, alternadas con oteros y mesas de cumbres planas. El término de Colmenar de Oreja estaría rodeado por un entorno desarbolado en el páramo, y con un predominio de cultivos cerealistas.
La Urbanización los Vallejos y la del Valle de San Juan, estarían localizadas en la terraza fluvial o campiña constituida por materiales cuaternarios y con frecuentes escarpes abruptos provocados por la erosión sobre los materiales sedimentarios. Esta zona estaría rodeada preferente por olivos dispuestos en terrazas de cultivo.
Por último, la urbanización Urtajo y la del Balcón del Tajo, estarían situadas en una zona más próxima a la vega del Tajo, constituida también por materiales cuaternarios pero sin esos relieves abruptos como en el anterior caso, sino que constituye una zona de escasa desniveles del terreno en donde se conjuga preferentemente el cultivo del olivo y de la vid.
En cuanto a la localización de los municipios con respecto al entorno natural, los municipios que se localizan en el páramo, como sería el caso de Colmenar de Oreja, serían: Carabaña, Ciempozuelos, Chinchón, Ambite, Tielmes y Villamanrique del Tajo, los cuales tienen unas características concretas de su medio físico que se concretarán a continuación.
Los pueblos de la vega serían: Estremera, Morata de Tajuña, Orusco, Aranjuez, Fuentidueña del Tajo, Perales del Tajuña y San Martín de la Vega. Los cuales, al situarse en la vega o llanura de inundación presentan una pendiente muy suave lo que favorece la creación de meandros en los ríos, así como el depósito de sedimentos en los cauces de los mismos, depósitos que generan un suelo joven y rico para la actividad hortícola. Comprenden los sotos y riberas, formaciones en las que se encuentran distintas especies arbóreas y arbustivas junto a una profusa vegetación palustre de juncos y carrizales.
Por último, los municipios que se ubican en la campiña son: Villarejo de Salvanés, Brea del Tajo, Belmonte del Tajo, Titulcia, Valdaracete, Valdelaguna y Valdilechas. Debido a su ubicación estos pueblos se caracterizan por ser una zona de contacto entre la vega y las partes altas del páramo con un relieve más regular que permite un cultivo agrícola extensivo, dando lugar a un bello paisaje de grandes extensiones cerealistas, viñedos y cultivos olivareros.Entre los llanos y cerros y las terrazas fluviales son abundantes los escarpes abruptos, como se ha comentado anteriormente, provocados por la erosión sobre materiales sedimentarios, en los que las margas y los yesos son protagonistas.
En cuanto a la vegetación, Coscojares y monte bajo aparecen de manera dispersa por la zona, surgiendo pinares de cierta antigüedad y algunos encinares degradados de carácter mediterráneo pero de gran valor por la diversidad de especies botánicas que sustentan, así como una interesante fauna, en especial lepidópteros, que encuentran aquí un lugar de singular atractivo.

4.2.2. Condiciones agronómicas en relación con el clima, orografía, edafología e hidrografía.

4.2.2.1. Clima:
El clima de Colmenar de Oreja es Mediterráneo Templado Seco: Este clima se asocia con las zonas de depresión y las vegas formadas por el plexo de ríos Tajo, Tajuña y Jarama. Las características climáticas del mismo vendrán determinadas por dos factores principales: la mediterraneidad y la continentalidad.
El clima mediterráneo, imperante se caracteriza por presentar unos veranos calurosos y secos, y unos inviernos fríos y húmedos. Esto se debe entre otras cosas a la acción de los vientos alíseos, que en las épocas estivales soplan desde el interior del continente hacia las zonas marinas y en el invierno soplan desde el océano al continente. Así, se produce una situación en la que el aporte de humedad al territorio coincide con la época de frío, y en la temporada calurosa, el viento apenas porta humedad.
La consecuencia más notable de esto, es que durante los meses estivales se produce una situación de estrés hídrico debido al escaso aporte de humedad y a la alta evapotranspiración producida por el calor, que produce sobre todo en la zona de los Páramos, una marcada sequía estival de mayo a octubre.
La continentalidad es el efecto por el cual las zonas del interior de los continentes, al estar alejadas de las masas marinas, no disfrutan del efecto amortiguador de la temperatura que tiene el agua por su capacidad para absorber el calor. Estas zonas tendrán variaciones extremas de sus temperaturas, presentando veranos muy calurosos e inviernos fríos, siendo la temperatura media en enero de 5°C y la temperatura media en julio de 25°C. La temperatura media anual resultante es de 14ºC, con un periodo libre de heladas mayor de 6 meses.
Por otro lado, la posición geográfica de Colmenar de Oreja, en el sureste madrileño, nos revela gran parte de sus características climatológicas: por un lado, acoge las variantes dominantes de la zona centro de la Península, de clima mediterráneo templado y continental; y por otro lado, dada su ubicación más concreta en la submeseta Sur, de consideración semiárida, recibe también una influencia importante del clima mediterráneo de la gama más seca.
El componente mediterráneo del clima viene dado básicamente por la situación geográfica de la Península, mientras que la presencia de clima continental se debe a la altura de la meseta central, sobre la que se asienta la zona en cuestión.
Los 600 m de altitud de la meseta sirven de freno para una interiorización de la influencia oceánica imperante en el Norte peninsular, dejando paso al predominio del clima continental.
De manera más local, este hecho se ve amplificado por la aparición del Sistema
Central en el Norte de la Comunidad de Madrid, lo que contribuye al aumento del efecto barrera. Esto afecta directamente al territorio en el que se ubica Colmenar de Oreja ya que las características del relieve peninsular y en concreto los dos accidentes geográficos mencionados, la meseta y el Sistema Central, determinan que las precipitaciones provocadas por los temporales oceánicos sólo alcancen la zona del Sureste madrileño a través de la direccionalidad Suroeste de los mismos. De aquí se derivan, en gran medida, las condiciones de aridez de la zona que estudiamos, la cual posee una precipitación media anual de 400 mm/año.
Por tanto, las temperaturas extremas dentro del territorio dominado por el clima mediterráneo, junto a las variables de precipitación, se traduce en veranos muy cálidos y secos e inviernos fríos y también secos.
Por último, y en relación con las condiciones agronómicas, se puede afirmar que dada la altitud (753 m.) y latitud (40º 07' 00"N, 5º 47' 30"E) de Colmenar de Oreja, el clima no condiciona un monocultivo sino que fomenta la variedad de producción, la cual estará sujeta a la decisión del agricultor en función de sus mayores o menores rentas.
Por otro lado, la precipitación media anual cifrada en 400 mm/año, también hace que la irrigación no sea del todo necesaria, sino que se utilice con el único objetivo de incrementar la productividad de la explotación. Sin embargo, las variaciones interanuales de las precipitaciones, como es el caso de la acusada sequía estival, generan un retraso o pérdidas en las cosechas.
Para el caso de las temperaturas, las bajas registradas en los meses de invierno (temperatura media de 5ºC), hacen que sea una estación muerta para los cultivos, a lo que se suma el riesgo de heladas fuera de esta estación, las cuales también producirán pérdidas en las cosechas.

4.2.2.2 Orografía:
El valle del Tajo se labra sobre arenas, margas y arcillas en un amplio valle en el que domina el relieve tabular con páramos y campiñas.
En el páramo predominan las llanuras tabulares rematadas en caliza, alternadas con oteros y mesas de cumbres planas. En Madrid existen dos grandes páramos, el de Humosa, o Corpa, y el de Chinchón-Colmenar de Oreja.
La campiña está formada por margas y arcillas suavemente onduladas que aparecen tras la erosión de la capa caliza que tenían encima. Se desarrollan al sur y el suroeste de la Comunidad, aguas abajo del Tajo.
Por último, encontramos las vegas propiamente fluviales. Son las superficies de los valles fluviales en los que aparecen terrazas del cuaternario. Las vegas son muy estrechas en las montañas pero a medida que el río se abre, en las campiñas, se ensanchan y adquieren gran extensión.
En relación a las condiciones agronómicas, la ubicación de Colmenar de Oreja, en plena depresión del Tajo, hace que presente una pendiente muy suave, que sólo aumenta en las zonas de terrazas fluviales aunque sin llegar a constituir grandes desniveles que además son salvados con la construcción de terrazas que devuelven la horizontalidad al suelo. Este hecho presentará importantes ventajas en el contexto de las agriculturas moto-mecanizadas ya que esto, facilitará la mecanización de las explotaciones frente a las zonas de colinas y montañas.
Por otro lado, las pendientes y el espesor del suelo influyen en la capacidad de retención y circulación del agua, lo cual analizaremos a continuación.

4.2.2.3 Edafología:
Los suelos de la depresión o fosa del Tajo tienen su origen en la acumulación sedimentaria correlativa al proceso erosivo y de transformación del terreno.
Las discontinuidades del perfil son consecuencia del régimen sedimentario del río y del contenido en materia orgánica acumulada al ritmo de sucesivas avenidas, sin olvidar la influencia del hombre, que viene cultivando estos suelos por su gran fertilidad. Las vegas de los ríos o lechos de inundación se caracterizan por una elevada variabilidad edafológica.
Las diferencias vendrán marcadas por la litología propia de cada zona: en los páramos los suelos se forman primordialmente de materiales calizos, de aproximadamente un metro de espesor, y en ocasiones aparecen suelos rojos arcillosos formados por descalcificación de materiales calizos y a los que se conocen como “Terra rossa”, al dejar al descubierto como consecuencia de la erosión, los yesos y margas subyacentes. Frente a esto, nos encontramos con las terrazas fluviales de materiales cuaternarios en los que predomina el calcio, así como las vegas de los ríos que se asientan sobre depósitos aluviales recientes.
En los terrenos cultivados, el horizonte «A» ha sido fuertemente alterado, estando constituido por materiales sueltos cuya textura varía con el régimen de lluvias.
Los suelos ácidos que predominan en la mitad norte y oeste de la región son suelos frágiles y vulnerables a procesos de degradación por erosión, acidificación y contaminación, mientras que los suelos neutros o básicos del sureste, donde se ubica Colmenar de Oreja son principalmente vulnerables a la erosión eólica e hídrica y a la salinización, debido a la irrigación mal conducida conjunto a la periódica inundación de los suelos por los ríos.
Sin embargo, genéricamente, la susceptibilidad de los suelos de la Comunidad de Madrid a la erosión puede calificarse de moderada, muy por debajo de la media nacional, motivados por la escasa incidencia de la torrencialidad en las precipitaciones y las suaves pendientes dominantes.

Los tipos de suelos específicos que se dan en Colmenar de Oreja son:
Leptosoles: situados en el límite norte del municipio, constituyendo suelos limitados por las siguientes características:
- En profundidad poseen una roca dura continua.
- De material muy calcáreo.
- De capa continua cementada dentro de una profundidad de 30 cm. a partir de la superficie.
- Con menos del 20% de tierra fina hasta una profundidad de 75 cm
- Sin otros horizontes de diagnóstico que un horizonte A móllico, úmbrico y ócrico; con o sin horizonte B cámbico.
Calcisoles: Situados en una estrecha franja, también en el límite norte de Colmenar de Oreja. Estos suelos presentan un horizonte cálcico, petrocálcico o, simplemente, concentraciones de caliza pulverulenta blanda en una profundidad de 125 cm. desde la superficie. Sus horizontes de diagnóstico pueden ser un horizonte A ócrico o un horizonte B cámbico o horizonte B argílico impregnado en carbonato cálcico.
Tanto los Leptosoles como los Calcisoles se sitúan en las campiñas del Jarama, Tajuña y Tajo. En esta superficie los cultivos principales son los secanos cerealistas y vitivinícolas, que sustentan la mayor superficie agraria, aunque con problemas de yesos en la zona sur de la cuenca de Madrid.
Gypsisoles: Que son los que mayor extensión ocupan dentro del municipio, situándose en la parte central del mismo próximos a la cuenca de los ríos Tajo, Jarama y Tajuña, sobre depósitos de yesos y margas yesíferas. Estos suelos presentan un horizonte gypsico o bien petrogypsico, o ambos a la vez. A su vez, pueden tener horizonte A ócrico, un horizonte B cámbico o un horizonte argílico impregnado de yeso o carbonato cálcico y un horizonte cálcico o petrocálcico.
Los Gypsisoles son los suelos de los páramos, en donde se cultiva olivar y cereal, además de manchas de almendro y viñedo, en donde se reduce el uso agrícola limitado por el frío y estos suelos superficiales.
Fluvisoles: Suelen ser reconocidos como suelos aluviales o de vega. Suelos poco desarrollados edáficamente, ya que se desarrollan sobre depósitos aluviales recientes.
Sobre estos fluvisoles se dan los denominados regadíos de las Vegas, gracias a los aportes del Tajo y sus afluentes, aunque algunos riegos se dan también con aguas subterráneas.
Estos cultivos están dedicados al maíz, hortícolas (en situación periurbana), cebada, trigo, girasol y forrajes con producciones aceptables; intensificada en melón que también se cultiva en secano.

Sin embargo, a este esquema teórico, cabría decir como la agricultura es productora de nuevos suelos ya que las nuevas técnicas de laboreo de la tierra que requieren el uso de tractores, cambian la estructura del suelo, además de los aportes de abonos químicos para incrementar la productividad de los cultivos, que producen alteraciones en la composición química de los suelos.
Así mismo, la agricultura también produce paisajes, para nuestro caso el tipo de explotación ha configurado un paisaje mediterráneo, el cual se caracteriza por poseer paisajes rurales con campos de cereales, viñedos y olivares.
Además la disposición de las explotaciones agrícolas es dispersa y con frecuencia, las laderas de las colinas se convierten en terrazas.

4.2.2.3 Hidrología:
La procedencia de las aguas que se emplean en el riego de las explotaciones serán:
Aguas superficiales.
El área de estudio pertenece a la cuenca hidrográfica del Tajo, aunque también se verá influenciado por el Jarama, afluente del anterior; y el Tajuña y Manzanares, afluentes a su vez del Jarama.
Tanto el cauce del Tajuña como el del Jarama y el del Tajo, que son los más importantes e influyentes para Colmenar de Oreja, están rodeados por zonas de cultivo, por lo que la red de drenaje natural de la vega se encuentra muy modificada con un amplio sistema de acequias, caces y caceras.
Las aguas superficiales y más concretamente las que forman parte de la red fluvial (ríos y arroyos) adquieren unos comportamientos marcados por la topografía y la formación litológica del terreno. Por ello, no es casualidad que precisamente en las zonas donde abundan los materiales poco permeables, el terreno se muestre propicio a encharcamientos, habituales a menos que la geomorfología local disponga de una vía alternativa de drenaje, por ejemplo de una continuada inclinación del terreno.
Arroyos y aguas estacionales.
En las épocas primaverales, las lluvias de carácter torrencial hacen que se formen unas masas de agua que a pesar de su poca vistosidad son fundamentales para el mantenimiento de los ecosistemas mediterráneos.
Los arroyos y charcas estacionales posibilitan que numerosos organismos sean capaces de completar sus ciclos vitales asociándose a la humedad temporal que ofrecen los charcos, torrenteras, etc.
Aguas subterráneas.
Los acuíferos de la zona se engloban, por su comportamiento, en acuíferos cuaternarios que se dan en zonas aluviales y de terrazas bajas en los ríos principales, teniendo bastante representación en el área estudiada. Se trata de acuíferos libres, generalmente muy extensos, muy permeables y productivos, que se recargan a partir de la infiltración del agua de lluvia y descargan en los ríos.

Esto será importante sobre todo para los cultivos de regadío, los cuales se sitúan preferentemente en el fondo aluvial del Tajo.
Debido a la existencia de aguas de distinta procedencia, es decir, aguas subterráneas y aguas superficiales, también habrá distintos tipos de riego, como es el riego por aspersión y el riego por gravedad. Este último debido al emplazamiento en el que se ubican los regadíos: al ser fondo aluvial, las explotaciones también reciben riego por agua escurrida desde la terraza fluvial.
Por ello, tanto las aguas superficiales como las subterráneas en conjunción con los sistemas de producción agrícola generan a su vez, distintos paisajes agrarios como es el caso de las canalización de la red de drenaje natural. Además todos estos ríos ejercen un importante papel en los sistemas de regadíos.

Elementos del medio natural y atracción turística.
Colmenar de Oreja es muy conocido por sus vinos, fruto del cultivo de las viñas que se extienden alrededor. El corazón de la localidad, también muy conocido, es su Plaza Mayor, uno de los ejemplos más importantes de la Comunidad de Madrid, formada por una gran planta cuadrada típicamente castellana, junto a la que se sitúa la Iglesia de Santa María (siglo XII-XVI). Todo ello a propiciado que el conjunto de los elementos del medio natural de Colmenar de Oreja se hayan proyectado hacia la actividad turística, con numerosas rutas que acercan a los turistas hacia el medio físico y a su vez económico del territorio que nos ocupa. Algunos ejemplos son:
CANTERAS DE PIEDRA: En el subsuelo de Colmenar abundan las capas calizas de mediana calidad y bastantes sensibles a las bajas temperaturas. Pero por un capricho de la naturaleza, en un reducido perímetro de unas 30 Has. que quedo formando un singular filón de caliza más blanca y de extraordinaria calidad y belleza. Los colmenaretes lo sacaron de las entrañas de la tierra e hicieron posible que se utilizase en los Palacios Reales de Madrid y Aranjuez y en innumerables monumentos de Madrid, siendo elemento preferido para escultores.
PASEO POR LAS FUENTES: Una de las principales causas que dan vida y movimiento a una población, son las aguas. El vecindario de Colmenar de Oreja se surtía de agua a través de un importante número de fuentes y pozos públicos que invitan a un sugerente paseo.
LAS BODEGAS DE VINO: Las cuevas de vino de Colmenar de Oreja son de origen centenario. Excavadas en la piedra caliza conservan en su mayoría las tradicionales tinajas fabricadas en otros tiempos en Colmenar.
La temperatura y humedad constantes en estas cuevas son ideales para la conservación y envejecimientos de los vinos, que permiten sin duda una agradable visita en cualquier época del año.
EL TAJO POR COLMENAR DE OREJA: Tras discurrir durante unos kilómetros por la provincia de Toledo el Tajo vuelve a la Comunidad de Madrid pasando bajo el puente de Villarrubia, en el término de Colmenar de Oreja. A partir de este punto el río es la frontera natural entre la Comunidad de Madrid al Norte en la margen derecha y la Comunidad de Castilla-La Mancha al Sur en el margen izquierda. El curso por el término de Colmenar es sinuoso como corresponde a la amplia y plana vega que riega con sus aguas, con grandes meandros hacia el Norte y hacia el Sur pero siempre en dirección Oeste buscando el Real Sitio de Aranjuez.
Aunque la vegetación de ribera está desplazada por los cultivos agrícolas aún se conservan a lo largo del cauce muestra de vegetación de ribera, tanto arbustiva como arbórea, donde tiene refugio la fauna asociada. Las zonas más inaccesibles a la maquinaria agrícola así como aquellas donde el río se aproxima en uno y otro margen a los cortados que delimitan la vega son excelentes observatorios de vegetación y fauna riparia.
RUTA DEL TREN: Recorrido ecológico que aprovecha parte del trazado de la antigua línea férrea que unía Colmenar de Oreja con Madrid por la que discurría el "Tren Rompecepas". La ruta recorre los términos de Colmenar de Oreja y Chinchón, entre lomas, cerros y campos cultivados.
VISTAS PANORÁMICAS: Las más bellas pueden contemplarse desde el núcleo de Colmenar de Oreja, concretamente en el muro del Barrio Descaderado y desde los jardines de la propia Ermita del Cristo del Humilladero, que ofrecen una amplia y sugestiva panorámica del pueblo con la silueta del Castillo de Oreja y los Montes de Toledo de fondo.


5. CARACTERIZACION SOCIOECONOMICA DEL TERRITORIO


5.1. POBLACION: EVOLUCION Y CARACTERISTICAS GENERALES

5.1.1. Evolución de la población de Colmenar de Oreja

1950 5.695

1960 5.547

1970 5.150

1981 5.004

1991 5.206
1992 5.266
1993 5.342
1994 5.364
1995 5.439
1996 5.596
1998 5.510
1999 5.424

2000 5.412
2001 5.548
2002 5.452
2003 6.257
2004 6.637
2005 6.898
2006 7.247
2007 7.656
2008 8.127


Podríamos definir tres etapas de la evolución del contingente poblacional en el término municipal:

1. Perdida de población ente 1950 y 1980 leve pero sostenida (dinámica que se observa desde 1900).
2. Recuperación entre 1980 y 2000 en la misma medida.
3. Tendencia muy positiva desde 2000 (incremento poblacional del 50% aproximadamente).

Esta evolución se enmarca dentro de una dinámica general de escala regional (Comunidad de Madrid):
Entre 1900 y 1950 el crecimiento demográfico en la comunidad es moderado pero sostenido.
A partir de 1950 la corona metropolitana experimenta una fuerte tasa de crecimiento, mayor que la de Madrid. Dinámica que no se propaga más allá de modo que la periferia de la región se mantiene en tasas bajas de crecimiento o en dinámicas regresivas, según el municipio. Colmenar de oreja se mantiene en una línea de pérdida poblacional moderada: pierde 700 habitantes durante el periodo 1950-1980. Se traduce en una perdida del 12% de su población en 30 años.
A partir de 1980, y hasta 1996 el crecimiento demográfico hasta entonces restringido al municipio de Madrid y a la corona metropolitana se amplia al resto de la región. A su vez, Madrid entra en una fase de pérdida demográfica, mientras que los municipios metropolitanos mantienen las tasas más altas de crecimiento. Colmenar gana en torno a 600 habitantes, con lo que recupera la población perdida en el periodo anterior.
A partir de 1996 el crecimiento se acelera para toda la comunidad de Madrid. Pocos municipios pierden población. En términos de zonas estadísticas, las metropolitanas, la del noreste y la de la sierra central, son las que experimentan mayor tasa de crecimiento, y las que experimentan un crecimiento mas moderado son el municipio de Madrid, la zona de la sierra norte y la zona sureste. Colmenar experimenta un aumento mayor que el de su entorno comarcal y entre 1996 y 2008 eleva casi un 50% su población respecto a la de 1996.

Si se considera de forma acumulada, la variación relativa de la población en los últimos años así lo refleja:

Vamos a tratar de exponer y analizar algunas variables demográficas que pueden explicar la procedencia de tal crecimiento poblacional en el término municipal desde finales de los años 90.



5.1.2. Dinámica natural de la población

Experimenta actualmente un crecimiento vegetativo fuerte, por encima de los municipios de la región sureste. Se apoya en una tasa bruta de natalidad cercana al 15 por mil hab. y una tasa bruta de mortalidad que baja del 8 por mil. (2006). La caída fuerte de la natalidad y de la fecundidad femenina a partir de la década de los 70 es un hecho generalizable a todas las escalas territoriales en España. Los 90 son una etapa de inflexión donde se alcanzan mínimos históricos, y a partir de la cual la natalidad, la fecundidad y el crecimiento vegetativo retoman una dinámica ascendente.


La edad media de la población se sitúa en torno a los 30 años, siendo de las más bajas de la comunidad de Madrid y de la zona estadística sureste. Del mismo modo el índice de juventud (población menor de 16 años) se sitúa entre los 16 y 18 puntos, lo que supone un valor alto dentro de la comunidad de Madrid y de la zona estadística sureste. No obstante se sitúa por debajo de los valores máximos correspondientes a las zonas metropolitanas.

El valor del índice de envejecimiento de colmenar de oreja puede ser considerado como medio para el conjunto de la comunidad de Madrid, y bajo si se considera dentro de la zona estadística sureste, donde muchos municipios superan el 20%.


La proporción de dependencia puede ser considerada moderadamente elevada para la región de Madrid, y normal para la zona sureste. Estos valores corresponden con un índice de juventud elevado y con un índice de vejez también importante.


5.1.3. Movimientos migratorios

Tal y como muestran la tasa de migración y el saldo migratorio el siglo XXI inaugura un periodo en la dinámica migratoria del territorio.

El porcentaje de población residente en colmenar de oreja procedente de otros países se sitúa entre el 10 y el 15%, lo cual representa una importante inmigración extranjera en el municipio.
Los inmigrantes procedentes de otras comunidades autónomas representan en torno al 9% de los residentes en el municipio. Este dato muestra un valor muy bajo si se analiza lo ocurrido en el conjunto de la región madrileña, y se encuentra acorde con los valores que reflejan los municipios del sureste y de la sierra norte.
La población procedente de otros municipios de la comunidad de Madrid representa en torno al 40% de la población de Colmenar. El municipio de Madrid es el que muestra, en este sentido, el valor mas bajo de toda la comunidad, lo que vendría a mostrar un flujo emigratorio desde la capital hacia la periferia del cual se han beneficiado el resto de municipios de la región. Por su posición ultraperiférica (fronteriza) dentro de la Comunidad y por su acceso no directo por autovía nacional, Colmenar de Oreja muestra un valor de inmigración que aunque elevado, es de los más bajos dentro de la región. El papel de las carreteras en la formación de asentamientos vinculados a la capital se aprecia muy bien en este aspecto. Los porcentajes más altos de población procedente de otros municipios de la comunidad (presumiblemente de la capital por lo anteriormente dicho) corresponden a municipios que acogen dentro de su territorio el paso de estas arterias. De esta forma, los porcentajes más elevados se distribuyen espacialmente a modo de corredores vinculados a estas carreteras.
Si se analiza un año representativo del incremento de la inmigración en Colmenar se demuestra un flujo importante de población proveniente del resto de municipio de la comunidad de Madrid; y teniendo en cuenta la “expulsión” reciente de población desde la capital hacia la periferia se puede interpretar una llegada significativa de personas de dicha procedencia:

2002: 265
Desde el extranjero a colmenar: 108
Desde el resto de las comunidades a colmenar: 22
De colmenar a la comunidad de Madrid: -119
De colmenar a otras comunidades: -11
Por tanto ha tenido que haber por lo menos 265 emigrantes a colmenar desde la comunidad de Madrid.

5.1.4. Síntesis de la dinámica demográfica reciente en Colmenar:
El crecimiento vegetativo, aunque siendo positivo, no explica por si solo el excepcional aumento de población.
Aunque la emigración desde colmenar ha sido intensa a desde el año 2000, la inmigración, sobre todo desde el extranjero y desde el interior de la comunidad de Madrid ha compensado las cifras de emigración, posibilitando un saldo migratorio muy positivo. La inmigración se presenta como el principal motor del crecimiento demográfico experimentado en el municipio desde el año 2000.
El hecho de que sea la inmigración el factor más determinante nos obliga a preguntarnos cuales son las claves de la atracción que ejerce Colmenar a la llegada de residentes. Estas pueden ser variadas, al igual que las diferentes motivaciones que lo han podido impulsar, y de ello nos ocuparemos a lo largo del trabajo. Lo que parece claro no obstante, a la luz de la procedencia de los llegados al municipio, es que la situación de colmenar dentro de la órbita geográfica de Madrid es un factor decisivo en la comprensión de la dinámica demográfica alcista en este espacio, y en este sentido hay que destacar, que lejos de ser un espacio rural profundo, se esta viendo afectado por procesos derivados de su periurbanismo.


Características residenciales del municipio
Total de viviendas familiares secundarias de Colmenar de Oreja: 1.502 (2001)
Porcentaje de viviendas familiares secundarias de Colmenar de Oreja:
41,41 (1991)
34,24 (1996)
36,28 (2001)
Es una relación bastante alta para el conjunto de la comunidad, que se da mayoritariamente en municipios periféricos preferentemente de la sierra.


5.2. ECONOMIA Y DESARROLLO RURAL

5.2.1. El estado de las comunicaciones y los equipamientos de transporte.

Por carretera, la principal vía de acceso al municipio desde Madrid es la autopista nacional III (carretera de Valencia). A la altura del Km. 50 de esta autopista se toma el desvío. Colmenar de Oreja se sitúa a unos 15 Km. una vez se abandona la autopista y se toma la comarcal que conduce al pueblo previo paso por Belmonte de Tajo. La carretera continúa pasado el pueblo en dirección suroeste y se dirige hacia los demás núcleos de su municipio (Balcón del Tajo y Los Vallejos), conectando finalmente con Aranjuez, situada a unos 20 Km. de Colmenar de Oreja. También se conecta con Chinchón, situado a escasos 5 Km. al norte, mediante carretera comarcal. El municipio esta articulado internamente mediante una red de carreteras locales, y se relaciona con los municipios colindantes mediante una red principal.
La autovía nacional IV (carretera de Andalucía) es otro posible itinerario de conexión con Madrid, pues transcurre muy cerca de Aranjuez.
Mediante tren de cercanías el municipio se halla conectado con Madrid, además de estarlo con otras localidades de su entorno (Chinchón, Valdelaguna, Titulcia, Valdemoro, Aranjuez y Villarejo de Salvanés).
Se puede legar también con los servicios regulares de autocar. Desde Madrid, la línea 337 (Conde de Casal) sigue el itinerario Madrid-Chinchón-Valdelaguna o bien la línea 415A (que pasa por Pinto). La línea 430 conecta Aranjuez con Villarejo de Salvanés, estableciendo parada en Colmenar de Oreja.
Así que nuestro municipio se halla bien integrado en la red de transportes ferroviaria y por carretera. La comunicación con los núcleos de su entorno próximo es eficaz y la existencia de dos arterias de rango nacional situadas a poca distancia (15 y 25 Km.) acercan al municipio a la capital de España, permitiendo relaciones de influencia con ella que no podrían verse favorecidas de otro modo. Algunas de las dinámicas que se producen en Colmenar podrán estar vinculadas a esta cercanía con la capital (50 minutos de trayecto por carretera).

5.2.2. Base económica del territorio y diversificación de las actividades.

El producto interior bruto per capita de Colmenar de Oreja es de casi 17.000 euros/año. El de la zona estadística sudeste es de 19.500 euros/año; y el de la Comunidad de Madrid es 28.000 euros/año. Por tanto Colmenar se sitúa por debajo de la media de la riqueza por persona de su zona estadística, que a su vez se encuentra por debajo de la media de la Comunidad Autónoma.
La zona de valores más altos se ubica en la Almendra central de la capital y otros distritos norteños, junto con los municipios de la zona Noroeste y norte. Los extremos de la Comunidad al Norte, Sudoeste y Sudeste tienen en general valores bajos, apreciándose un gradiente en descenso desde el centro hacia el exterior.
Para Colmenar, comparando las tasas de actividad según municipio de trabajo y según municipio de residencia se observa un descenso en el valor del uno al otro. Se deduce que una parte de los residentes activos no desarrolla su actividad en el municipio. Colmenar de Oreja emite entre 2 y 4 veces más trabajadores de los que recibe. Una dinámica opuesta se observa en el municipio de Madrid, en el que la tasa de actividad por municipio de trabajo supera a la tasa de actividad por lugar de residencia. Es decir, parte de los trabajadores residen fuera y vienen a trabajar a Madrid. En este sentido es necesario señalar que en torno a un 25% de los ocupados residentes en colmenar de oreja trabaja en el municipio de Madrid.
Los indicadores de empleo (tasa de actividad, tasa de paro, empleos por cada 100 habitantes, densidad de empleos, empleo medio por establecimiento) no ofrecen datos favorables, Colmenar de Oreja se sitúa entre los municipios con valores mas bajos.

5.2.2.1 Sectores económicos predominantes. Distribución geográfica general de las actividades en el municipio.
Las actividades industriales y terciarias se localizan en los núcleos urbanos, principalmente en el núcleo de Colmenar de Oreja. El 85% del espacio del término municipal de Colmenar de Oreja esta dedicado a actividades agrarias (10.737 has.).

5.2.2.2. El sector primario.
El porcentaje de población activa ocupada en el sector agrario en el municipio de colmenar de oreja es de 3,95 % (2001), un valor moderado. Deja un porcentaje de producto interior bruto per capita del 6, 61 % (2005) frente a al resto de sectores económicos. Si se relaciona con el espacio que ocupa (85% del territorio municipal), la conclusión es que genera escasa riqueza en relación al suelo que requiere. Sin embargo este es un problema que parece intrínseco a la actividad agraria, y veremos con que mecanismos se esta tratando de luchar contra la falta de productividad agraria en Colmenar. La agricultura es, con mucho, la actividad predominante del sector primario en Colmenar de Oreja.

5.2.2.3. Sector secundario.

No existe ningún gran polígono industrial a nivel regional en Colmenar. Sin embargo el empleo en el sector secundario se sitúa cercano al 55%. Llama la atención que el empleo en el sector de la construcción fuese en 2003 cercano al 35%, y que estos valores fuesen también arrojados por municipios periféricos de la comunidad. A ello puede contribuir una actividad constructiva fuera del municipio que atraiga a sus residentes, o también puede verse potenciada por un dinamismo edificatorio interno que refleje una presión sobre el suelo derivada de la propagación del crecimiento urbano desde el núcleo metropolitano de la región. En cualquier caso la concentración de tanto empleo en un sector golpeado fuertemente por la crisis económica en España a partir de 2007 no ha podido sino perjudicar a la estructura económica del municipio.

5.2.2.4. Sector terciario.
Tiene una presencia bastante alta. El porcentaje de ocupados en el sector servicios en el termino municipal es del 40% en, aunque la potencia del sector servicios muestre un gradiente negativo, en este caso, desde el centro hacia la periferia de la comunidad.

La importante presencia de actividades terciarias y secundarias en el municipio esta ligada a una necesidad de diversificación de las actividades productivas en los medios rurales (ya no exclusivamente agrarios) denunciada desde diferentes ámbitos sociales en los últimos tiempos, y que en Colmenar de Oreja se han visto impulsadas por la difusión de actividades desde Madrid, acentuando de este modo su condición de espacio rural con influencia urbana.

5.2.2.5. Proyección de la agricultura en Colmenar de Oreja
En 1990 se crea la denominación de origen de vinos de Madrid, a la cual se adscriben tres subzonas: San Martín, Navalcarnero y Arganda. Colmenar de Oreja queda incluido en la subzona de Arganda, que comprende básicamente la comarca de las Vegas. Algo mas del 50% del viñedo inscrito en la D.O. vinos de Madrid esta ubicado en esta subzona. Se compone de 29 bodegas, que elaboran más del 60% del total del vino de la denominación de origen. De estas 29 bodegas, 8 pertenecen a Colmenar de Oreja, siendo el municipio de la subzona con más bodegas.
La conformación de la denominación de origen ha aportado importantes beneficios a estas regiones, y por supuesto a Colmenar de Oreja. En primer lugar ha permitido que sobrevivan prácticas agrícolas que no podrían haber competido en el marco económico global y que hubiesen desaparecido, con el consiguiente empobrecimiento de la cultura agraria y de los modos de vida y paisajes rurales tradicionales de la región. En segundo lugar se ha convertido en una estrategia de competitividad que apuesta por la calidad en vez de por la cantidad, y que ha logrado integrarse en el mercado eludiendo la competencia directa con las grandes economías de escala. De este modo, el producto ha conseguido trascender las fronteras nacionales y convertirse en un reclamo en el extranjero.
Dejando a un lado la caída de las ventas a partir de 2007 por la coyuntura económica global y considerando las ventas hasta 2006 se ve como ha afectado positivamente la instauración de la denominación de origen de vinos de Madrid en la comercialización del producto.
Recientemente se ha creado también una denominación de origen de aceites de Madrid, de la cual participa la almazara “Sociedad Cooperativa del Campo Santo Cristo” de Colmenar de Oreja. La zona de producción, elaboración y envasado del aceite de la Denominación de Origen está situada en las comarcas naturales de Las Vegas, Campiña, Suroccidental, zona Suroriental de Lozoya- Somosierra y Área Metropolitana de la Comunidad de Madrid. Tal y como se dice en el pliego de condiciones D.O. aceite de Madrid del BOCM, que establece las condiciones del marchamo:
“El producto se obtiene mediante procedimientos físicos y mecánicos que no alteran el aceite”. Es decir, se garantiza la calidad ecológica del producto como una de las claves de su plusvalía.
Se establecen las variedades de aceituna y sus características físicas, químicas y organolépticas.
Se determinan las zonas geográficas de producción, transformación y elaboración; y se garantiza dicha procedencia. La indicación geográfica ayuda a la diferenciación del producto, factor clave en la viabilidad comercial de estas pequeñas producciones.

En conclusión, la agricultura de Colmenar avanza hacia la búsqueda de una autenticidad. La herramienta para ello es el agrupamiento bajo una denominación de origen que obliga al agricultor que quiera participar de los beneficios que trae consigo a poner en práctica una serie de condiciones productivas que garanticen la calidad del producto, a cambio de las cuales este alcanza un valor superior y logra una cuota de mercado. En definitiva, la existencia de dos denominaciones de origen en Colmenar nos habla del desarrollo de una agricultura rentable y productiva, y que contribuye a la conservación del paisaje rural y del medio ambiente natural, con los beneficios que ello también conlleva. Son nuevas formas de organización basadas en el nuevo concepto de desarrollo rural sostenible, que además suponen una reorientación eficaz a la hora de afrontar la competitividad en la economía globalizada. Sin duda, la denominación de origen y lo que ello conlleva, es un claro ejemplo de puesta en valor de los recursos propios y como a partir de ellos se puede construir un modelo o estrategia de desarrollo local endógeno que se apoye en la iniciativa y la actividad de grupos autóctonos. No hay que olvidar, no obstante, que la existencia de un mercado potencial de la envergadura de Madrid tan cercano a Colmenar de Oreja es un elemento externo que contribuye a este impulso.

En colmenar de oreja se han desarrollado conjuntamente los programas LEADER y PRODER.
En colmenar de oreja existe una importante red de casas rurales. Además en este sentido se hace necesario la existencia de plataformas y medios de difusión de los valores del medio que atraigan la llegada de población sobre todo urbana a estos lugares.
Al iniciarse los años noventa, y durante algún tiempo, se entendió el turismo rural como algo restringido a la simple disposición de viviendas adaptadas al uso turístico, sin ofrecer ningún otro tipo de servicios ni actividades complementarias. En los últimos años son muchas las iniciativas empresariales que han encontrado en el medio rural el lugar ideal para localizar diversas actividades capaces de satisfacer las demandas de cinco millones de personas que viven en el área metropolitana.
Al mismo tiempo, se observa una mejora en la oferta de turismo rural, con alojamientos y restaurantes cada vez mejor preparados para atender la demanda de una sociedad urbana que exige un producto de calidad
Colmenar de oreja se integra dentro de la ruta vitivinícola de la comarca de las vegas. El elevado número de bodegas así como la fuerte tradición en el cultivo de variedades como Airén, Tempranillo, Garnacha, Cabernet, Sauvignon o Malvar hacen de este lugar una parada obligatoria para todos los amantes del vino. Además, pese a que gran parte de las bodegas se han modernizado, todavía conservan sus técnicas de antaño, lo que incrementa su encanto. Algunas de ellas tienen su propio museo y otras cuentan con tiendas donde adquirir sus productos (en algunos casos encontraremos desde cavas hasta vinos ecológicos).
También se integra dentro de otras rutas diseñadas dentro de la comarca agraria de Las Vegas, como son la ruta de las vegas o la ruta de las Plazas Mayores.


PLAZA MAYOR DE COLMENAR DE OREJA
El desarrollo de infraestructuras y ofertas turísticas, y de medios de difusión de los valores regionales y comarcales de índole cultural, natural y paisajística en el medio rural, se ha manifestado en los últimos años como un recurso económico explotable para las áreas rurales. El giro en la tendencia sobre preferencias y gustos acerca del entorno ideal, con una creciente valoración de los entornos naturales y de su calidad paisajística, ha sido aprovechado para crear una nueva vía de crecimiento y subsistencia en áreas rurales que repercute favorablemente sobre las pequeñas economías familiares de estos lugares. De nuevo, se trata de la búsqueda del recurso no explotado que puede convertirse en activo, y que además tiene una base en el desarrollo endógeno del propio territorio.


5.2.3. Desarrollo urbanístico.

Hasta principios de la década de los 90 solo existía el propio núcleo de Colmenar de Oreja dentro del territorio municipal, y ni siquiera en él se había producido crecimiento urbanístico significativo.

A partir de principios de los 90 surgen dos núcleos más dentro del término: el Balcón del tajo y los Vallejos. Se localizan en una terraza fluvial sobre el río Tajo. El tipo de edificación es unifamiliar aislada o pareada.

A continuación se muestran las diferentes fases en el desarrollo del núcleo de Balcón del Tajo. En la primera fotografía (anterior a 1990) el espacio que ocupa actualmente el núcleo no presenta urbanización ninguna. En la fotografía de 1991 ya se ve la primera fase en la construcción del núcleo, y en las posteriores (2001 y 2006) se ve como el asentamiento se desarrolla y se densifica.

Una evolución idéntica a la anterior sufre el núcleo llamado los Vallejos, situado a escasos 2 Km. hacia el este del Balcón del Tajo. A continuación presentamos la misma secuencia fotográfica esta vez del núcleo de los Vallejos:

El núcleo de colmenar de oreja no ha sufrido una expansión significativa, sin embargo los usos del suelo han cambiado. Los espacios industriales se han abierto un hueco en el urbanismo de Colmenar y los asentamientos residenciales recientes también tienen presencia en el núcleo

Tres claves fundamentales intervienen en los nuevos usos urbanísticos residenciales desarrollados a partir de 1990:
Cercanía física la capital y al área metropolitana junto con el desarrollo de los transportes y sus infraestructuras.
Abartamiento del precio del suelo y de la vivienda en áreas alejadas de la capital.
Financiación y empleo para los municipios con la venta y recalificación de suelos.
Puesta en valor de la calidad de vida en habitats rurales.

Son elementos que configuran la realidad del fenómeno de presión urbanística que viven los territorios rurales vinculados a una situación periurbana. Es un proceso que llega hasta estos espacios por propagación desde las áreas urbanas centrales.


5.2.4. Cambios producidos en la comarca de las Vegas tras la entrada en la UE.
Principales características y problemática socioeconómica de la Comarca de las Vegas.
La inmensa mayoría de la población de esta comarca, situada hacia el sureste de la capital, con Aranjuez como principal municipio, trabaja en los sectores secundario y terciario, porque buena parte de la comarca se ha vinculado prácticamente a la ciudad de
Madrid, desde el punto de vista económico. La principal actividad agraria de la población es la agricultura, seguida de la ganadería extensiva de ovino.
La distribución de la población ocupada por sectores, en 1996, es la siguiente: 5%, agricultura, 30%, industria, 12%, construcción y 48%, servicios, con un resto del 5% no clasificados. La tasa media de paro en 1997 era del 15,71%, una de las más elevadas de las zonas rurales y de la que conviene destacar su mantenimiento durante los últimos años, pese a la recuperación general del empleo en la región.
Para el caso de las Comarcas de la Campiña y de las Vegas, se incluyen los datos para todos los municipios de forma general dentro de la Zona Objetivo 2, a pesar de que algunos municipios de estas Comarcas forman parte de la Zona Transitoria y no de la Zona Objetivo 2.

Problemática especifica de la zona de intervención del Objetivo 2.
Principales desequilibrios
Entre los estrangulamientos más relevantes a los que tratan de dar respuesta las actuaciones de la UE, cabe subrayar los siguientes:
1. Deficiente sistema de comunicaciones terrestres entre los diferentes núcleos de la zona, así como con el municipio de Madrid y con otras áreas de la región. La rigidez y limitación del sistema radial de carreteras y de ferrocarril dificulta las relaciones transversales, lo que se ve agudizado por la saturación de las actuales carreteras.
Esta debilidad ocasiona importantes costes de interacción y aglomeración.
2. Deterioro o inadecuación de los espacios industriales (carencias en las dotaciones y servicios mínimos de urbanización y equipamiento, déficit en infraestructuras avanzadas, falta de solución a los problemas de mantenimiento y gestión de las áreas industriales existentes, oferta irregular de suelo, falta de articulación conjunta entre los distintos municipios de las zonas industriales objeto del DOCUP, etc.
3. Baja calidad medioambiental de algunas zonas, con un elevado deterioro de los espacios públicos y naturales, tanto en las áreas urbanas como en los espacios rurales.
En el caso concreto de la zona Sur y el Corredor del Henares se trata de un área que puede calificarse como la más degradada de la Comunidad de Madrid. Esta degradación se manifiesta a través de las carencias de zonas verdes y parques, la elevada incidencia ambiental de los vertidos de residuos líquidos, carencias en las dotaciones de agua, en cantidad y calidad adecuadas, pérdidas de hábitats naturales, altos consumos energéticos y escasa eficiencia energética, a lo cual se añade la escasez de acciones de concienciación y educación ambiental.
4. La debilidad y escasa estructuración del tejido productivo característico de la zona, en el que predomina la pequeña empresa industrial, con bajo desarrollo tecnológico, baja tasa de incorporación de nuevas tecnologías que permitan aumentar la competitividad y competir en el mercado globalizado, orientación preferente hacia mercados locales, excesiva especialización en sectores productivos maduros o tradicionales, bajos niveles de autofinanciación, dificultades de acceso al mercado de capitales y reducida capacidad de financiación, escasez o inexistencia de servicios avanzados a las empresas, que no se corresponden con la demanda actual del tejido empresarial y, en fin, limitada cultura de cooperación interempresarial, en especial en las PYMEs de las zonas industriales y en las comarcas.
5. Debilidades estratégicas en el sistema regional de I+D, en especial en relación al contexto comunitario. Dichas debilidades se manifiestan en cuestiones como la frecuente especialización de la investigación y de sus instrumentos de promoción en áreas poco orientadas hacia las necesidades regionales o de los tejidos productivos locales, ya que responden en muchas ocasiones a estrategias de orientación nacional o supranacional, falta de integración entre las actividades investigadoras de centros de I+D, Universidades y Empresas, estado embrionario de los mecanismos de intercambio y difusión de conocimientos, dificultades para la financiación y puesta en práctica de proyectos, insuficiente transferencia de tecnología entre grandes y pequeñas empresas, carencia de proyectos de base tecnológica sustentados en procesos de spin-off y de iniciativas de nuevos emprendedores.
6. Las comarcas rurales disponen de un conjunto de debilidades específicas, cuya singularidad respecto a las de los ámbitos industriales o urbanos, las hace merecedoras de un tratamiento especial: población envejecida, con un bajo nivel educativo y un escaso dinamismo y motivación, pirámides de población recesivas, problemas ambientales como la congestión ambiental en determinados lugares, provocada por la concentración espacial y temporal de la demanda de ocio y esparcimiento rural, limitada capacidad de la agricultura para liderar de forma aislada procesos de crecimiento económico, fuertes debilidades en cuanto a las posibilidades de formación de tejido empresarial, en general, debido a la propia inexistencia de una masa crítica de establecimientos productivos de suficiente dimensión y existencia de obstáculos al desarrollo del turismo rural.

Principales orientaciones estratégicas del Objetivo nº 2
La estrategia propuesta dentro del Objetivo 2 y aprobada por Decisión de la
Comisión Europea el siete de marzo de 2001 responde a un diagnóstico de las principales fortalezas y debilidades estructurales de la región que en dicho Documento de Programación se sintetizan de la forma siguiente:
La estrategia de actuación se centra en aquellos ámbitos que se perciben como de mayores necesidades de actuación. Estos son, sobre todo: la mejora de la competitividad, el empleo y el desarrollo del tejido productivo, así como avanzar en el desarrollo de la sociedad del conocimiento, con especial atención a los campos de la I+D y a la sociedad de la información. Sin embargo, la estrategia de desarrollo de la Comunidad de Madrid no olvida otras necesidades más ligadas al campo medioambiental, al desarrollo local y urbano y al fomento de las energías renovables y desarrollo de los centros intermodales de transporte.

Para ello, primeramente se ha elaborado un diagnóstico de las debilidades y fortalezas para esta zona objetivo 2:
Debilidades
1. Deficiente sistema de comunicaciones terrestres en sentido transversal.
2. Deterioro o inadecuación de los espacios industriales (carencias en dotaciones e Infraestructuras avanzadas, abandono de espacios en funcionamiento, oferta irregular de suelo, desarticulación intermunicipal, etc.).
3. Baja calidad medioambiental y desequilibrio territorial.
4. Tejido productivo con bajo desarrollo tecnológico y medioambiental, baja internacionalización, descapitalizado, atomizado y carente de servicios avanzados.
5. Debilidades estratégicas en el sistema regional de I+D.
6. Pérdida de población por falta de estructuras sociales.
7. Pérdida de población por los obstáculos al desarrollo económico diversificado.
Fortalezas
1. Fuerte demanda de carácter final e intermedia en la región.
2. Importantes centros de investigación y universidades.
3. Tejido empresarial en desarrollo y abierto a la innovación y la internacionalización.
4. Inclusión de la mayoría de zonas en regímenes de ayuda de estado.
5. Creciente sensibilidad medioambiental y potencial de creación de empleo en ese ámbito.
6. Elevado potencial turístico, recreativo, de ocio y disponibilidad de recursos de energías renovables.

De manera más precisa las estrategias prioritarias a desarrollar son las siguientes:
1. Fomentar de forma horizontal para el nuevo periodo de programación las actuaciones encaminadas al incremento de las posibilidades de empleo y la consolidación de las iniciativas empresariales, muy en particular considerando el objetivo de integración
y equiparación de la mujer en el mercado de trabajo.
2. Dinamizar el tejido económico de las zonas seleccionadas a través de la potenciación de actuaciones destinadas a la mejora de la competitividad, el empleo y el desarrollo del tejido productivo que impliqué a un amplio número de PYMES en la orientación general de la política de empleo. En este sentido, el apoyo a proyectos de inversión, la mejora de las condiciones de financiación de las empresas, la provisión de espacios productivos y de servicios a las empresas y el apoyo a su internacionalización constituyen los mejores ejemplos de intervención.
3. Con el objeto de facilitar el acceso de las empresas localizadas en áreas rurales a las ayudas establecidas, se recomienda mantener órdenes de ayuda diferenciadas para los municipios rurales.
4. Profundizar en la investigación y el desarrollo tecnológico a través de la creación y mejora de centros públicos de investigación o tecnológicos, ayudas al equipamiento científico y tecnológico, y el apoyo a proyectos de investigación, innovación y desarrollo tecnológico. Por otro lado, la coordinación entre Universidades, centros tecnológicos y empresas se debe potenciar mediante fórmulas estables de cooperación.
5. El desarrollo de las comunicaciones debe entenderse en sentido amplio y, por tanto, además de asegurar la universalización del servicio básico, garantizar las posibilidades de acceso a la «sociedad de la información».
6. Impulsar el desarrollo de las infraestructuras de transportes, principalmente el transporte intermodal, la alta velocidad y las infraestructuras aeroportuarios, con especial atención a la incidencia medioambiental.
7. Potenciar el desarrollo de medidas relacionadas con el medio ambiente y el entorno natural, que han contado con un grado de ejecución muy bajo en el período evaluado, a través de la protección y regeneración de espacios naturales, la reducción de la contaminación ambiental y la recuperación de espacios degradados.
8. Asegurar una mayor y mejor presencia efectiva de las Corporaciones Locales que favorezca la ampliación de la población beneficiada, por ejemplo en la rehabilitación y equipamiento de zonas urbanas, las infraestructuras turísticas y culturales, o la conservación y rehabilitación del patrimonio histórico-artístico municipal. Establecer vías de financiación accesibles para que los ayuntamientos garanticen su cuota de cofinanciación en el programa.

Para la consecución de todos estos objetivos se ha desarrollado unos ejes de intervención para el Objetivo nº 2, destacando los siguientes:

- Eje 1: mejora de la competitividad, el empleo y el desarrollo del tejido productivo.

- Eje 2: Medio ambiente, entorno natural y recursos hídricos.
Las actuaciones que se concretan en este Eje se fundamentan en la realidad de unos espacios degradados en los municipios industriales que componen la zona Objetivo 2 y, junto a ello, la necesidad de proteger el medio ambiente rural en las zonas rurales Objetivo 2. Además, cobran especial importancia las actuaciones de sensibilización ambiental.

- Eje 3: Sociedad del conocimiento (innovación, i+d, sociedad de la información)
En este Eje, se prevén actuaciones que se contienen, en su mayor parte, dentro del Plan
Regional de Investigación Científica e Innovación Tecnológica (PRICIT) de la Comunidad de Madrid. Ello confiere a dichas actuaciones programadas un valor añadido que deriva del esfuerzo de planificación y programación realizado en la elaboración del PRICIT, lo que supone un enfoque estratégico del que se beneficia este Eje.
- Eje 4: Desarrollo de redes de comunicación y energía.
Una de las grandes necesidades regionales es responder de forma adecuada al incremento de los desplazamientos transversales, frente a los orientados al centro urbano tradicional (Madrid capital), profundizando en la idea del transporte vertebrador del territorio como malla, para de este modo complementar el esquema radial.
El enorme desarrollo de los grandes municipios del Sur de Madrid, núcleo demográfico y económico clave de la zona Objetivo 2, ha hecho que los últimos años las interrelaciones entre estos municipios sean cada vez mayores, con una decreciente dependencia de la capital. Sin embargo, la estructura radial de los sistemas de transporte hace necesario dotar a estos municipios de sistemas de transporte públicos que se conecten entre sí, promocionando con ello los usos públicos del transporte.
Se hace igualmente necesario complementar los nodos de transporte que conectan estos municipios a través de intercambiadores entre la nueva línea de metro, que conecte todo el Sur madrileño y la red de autobuses y de cercanías. Esta es la forma de dotar de la máxima funcionalidad al sistema de transporte público de la zona Sur de Madrid.
En lo que se refiere al ámbito energético, se constata la urgente necesidad de revitalizar el compromiso comunitario y de los Estados miembros para fomentar más activamente la eficacia energética, especialmente, aunque no sólo por ello, a la luz del Acuerdo de Kyoto para reducir las emisiones de CO2.
Además de la reducción de las emisiones contaminantes, existen otros aspectos positivos que justifican el apoyo a las energías renovables, principalmente el de su contribución al desarrollo de las regiones, la mejora del autoabastecimiento energético, la reducción de la dependencia de las importaciones energéticas, el aumento de la seguridad de los suministros y en general a la protección del medioambiente. El aspecto del potencial de creación de empleo de este sector es repetidamente señalado por la Comisión Europea.

- Eje 5: desarrollo local y urbano
A través de las actuaciones de este eje se pretende dar respuesta a las múltiples necesidades que, en el ámbito municipal, se detectan en la zona Objetivo 2. En este sentido, hay que tener presente que en dicha zona conviven realidades municipales muy diferentes, que van desde municipios cercanos a 200.000 habitantes a otros que no llegan a 50.
Por ello existirá una importante diversificación de actuaciones a diseñar en colaboración directa con el ámbito municipal, que es el nivel donde mejor se conocen las necesidades ciudadanas y municipales.

Zonas de transición elegidas para la Comarca de las vegas
Los municipios catalogados dentro de este grupo serían Ambite, Belmonte del Tajo, Brea del Tajo, Carabaña, Estremera, Fuentidueña del Tajo, Orusco de Tajuña, Tielmes, Valdaracete, Valdilecha, Villamanrique del Tajo, Villar del Olmo y Villarejo de Salvanés.
Las actuaciones seguidas en estos municipios, por ser considerados zonas de transición, son las mismas que en las englobadas dentro del objetivo 2. Lo único que cambia son las cantidades totales de financiación destinadas para estas localidades, que serán lógicamente inferiores a las que se destinan para el objetivo 2.

Resultados
En total la Comunidad de Madrid invirtió unos cerca de 5 millones de euros en proyectos de desarrollo rural en la Comarca de las Vegas, respondiendo a las actuaciones de dinamización económica, antes recogidas, y realizadas durante el periodo 2002-2006, acogidas en los programas PRODER y LEADER+.
Para el año 2007, el Director General de Agricultura y Desarrollo Rural, visitó la zona para hacer un balance de los progresos realizados, y señala que se están desarrollando con eficacia los proyectos de turismo rural con la rehabilitación de numerosas casas rurales.
Así mismo también expresó como los Programas específicos de Desarrollo Rural (la Iniciativa Comunitaria LEADER y el PRODER), que integran una variada serie de medidas, entre las que destacan las referentes al fomento de actividades no agrarias, están favoreciendo la consolidación de nuevas iniciativas de desarrollo en el espacio rural. La puesta en marcha de estos programas trajo importantes resultados en la recuperación de los espacios rurales y sus recursos ambientales y culturales, así como en el aprovechamiento y puesta en valor de estos recursos para nuevas actividades económicas vinculadas a la atracción de flujos desde las áreas urbanas.
Por otro lado, las importantes inversiones de la Dirección General de Agricultura y la de otros organismos como el PAMAM (Patronato Madrileño de Áreas de Montaña), el programa PRISMA, o la existencia de determinadas líneas de subvención de algunas Consejerías (D.G. de Administración Local, D.G. de Turismo, Consejería de las Artes, etc.), se dirigen, en buena medida, al desarrollo de los pequeños municipios que, ante la falta de recursos propios, llevan a cabo un desarrollo local “sui generis” basado en las subvenciones.
Además, la importancia que tienen en el mundo rural madrileño los empleos públicos (subvencionados a través de la Consejería de Trabajo o de otros organismos como PAMAM) y de las ayudas sociales (subsidios de paro, jubilaciones, becas de formación, etc.) provocan a veces una actitud pasiva y de dependencia que puede llegar a tener efectos negativos en el desarrollo económico de estas áreas.


6. ELEMENTOS DEL PAISAJE RURAL EN SU COMPONENTE AGRARIA. ANALISIS EVOLUTIVO.

6.1. LA ESTRUCTURA AGRARIA
Es el conjunto de condiciones sociales y de propiedad de un espacio agrícola, que dependen del régimen de propiedad, el nivel técnico y la forma de explotación.

6.1.1. Nivel técnico.
Como podemos observar el municipio de Colmenar de Oreja a sufrido un importante aumento en el número de vehículos para la agricultura, desde 1989 a 1999. Nos ayuda para poder saber que la mecanización del sector agrario ha aumentado y mejorado, esta mejora también se da en la utilización de nuevos equipos de riego para las practicas de regadío.
El terreno de la comarca ha contribuido a esta mejora ya que al ser una zona relativamente llana ayuda a la introducción de maquinaria (ninguna área supera el 13% de desnivel, y la gran mayoría del terreno tiene menos del 3%). También hay que señalar las ayudas provenientes de la Unión Europea y el proceso de concentración parcelaria que han permitido y contribuido bastante a este progreso.

6.1.2. Vinculación a la tierra y formas de explotación
Aprovechamiento directo: el cultivador, con su familia o con asalariados, asegura el rendimiento de su propiedad.
Aprovechamiento indirecto: el derecho de explotación se cede temporalmente por el desembolso de un alquiler de dos tipos: Arrendamiento y aparcería.
Arrendamiento: el titular disfruta de los aprovechamientos de la explotación mediante el pago de un canon o renta independientes de los resultados de la explotación.
Aparcería: el trabajador agrícola paga un canon que consiste en una parte convenida del producto.
Aprovechamiento mixto: el agricultor trabaja su propia tierra y además arrienda tierras a agricultores vecinos.

Superficie total de las explotaciones según régimen de tenencia:

Superficie agrícola utilizada de las explotaciones según régimen de tenencia:

La forma de explotación directa es la forma dominante de explotación de tierras (80%), mientras que las formas indirectas de explotación de la tierra suponen el 19,3% de la superficie agrícola, y las formas mixtas tan solo el 0,7%. De la ultima parte, el régimen de arrendamiento ha experimentado un incremento muy sustancial entre 1989 y 1999, llegando casi a duplicarse la superficie explotada bajo este régimen de tenencia, mientras que el de aparcería se ha visto reducido a la mitad aproximadamente en el mismo periodo. Así que el aumento de la superficie explotada bajo formas indirectas en Colmenar se debe al incremento en el arrendamiento de tierras. A la duplicación de la superficie explotada de forma indirecta se acompaña un incremento, aunque bastante mas moderado, del aprovechamiento directo.
La razón por la que el régimen de aparcería ha menguado a favor del régimen de arrendamiento se relaciona con un incremento de la productividad y de los rendimientos en la actividad agrícola del municipio, puesto que en este caso al agricultor le conviene el pago de un canon fijo independiente del volumen de lo producido.
El que más ha crecido es el indirecto a pesar de bajar en el apartado de la aparcería, esto puede que se deba a la mayor presencia de las empresas relacionadas con las denominaciones de origen, las cuales al crecer su poder económico puede comprar tierras haciendo que los agricultores tengan y les convenga venderlas.
La superficie agrícola no utilizada es máxima en el caso de las formas de aprovechamiento directas, mínima en las tierras arrendadas, y nula en las tierras bajo regimenes de aparcería.

6.1.3. Tipos de explotación.

Explotaciones con tierras
Dominan poderosamente las explotaciones con tierras de menos de 5 ha (65%), es decir explotaciones muy pequeñas. El porcentaje de explotaciones pequeñas (menos de 20 ha) es del 86%, de medianas (de 20 a 50 ha) del 8%, y de grandes (+ de 50 ha) del 5%.
En cuanto a la evolución de las dimensiones de las explotaciones cabe destacar que tan solo disminuye el número de explotaciones muy pequeñas, de menos de 5 ha, que entre 1989 y 1999 pasan de suponer el 77% a suponer el 65%. El resto explotaciones se incrementan en número. Esta dinámica nos esta indicando que se ha llevado a cabo un proceso de concentración parcelaria para eliminar las explotaciones demasiado pequeñas y con ello mejorar el rendimiento agrario en el territorio de Colmenar de Oreja.

Tierras labradas: Son las que reciben cuidados culturales sea cual fuere su aprovechamiento y la fecha en que se hayan realizado dentro del año agrícola. Estos cuidados culturales son los que se efectúan con azada, arado, grada, cultivador, escarificador, extirpadora, etc., no entrando dentro de esta categoría las labores de extender abono, pases de rodillo o de tabla, cortes, escardas a mano, resiembra, etc., practicadas en las praderas permanentes.
Especies arbóreas forestales: se incluyen en esta modalidad las superficies cubiertas de especies arbóreas forestales, que no son utilizadas principalmente con fines agrícolas o con otros fines distintos de los forestales. Están incluidas las choperas en el interior o en el exterior de los bosques, los montes de castaños y nogales destinados prin­cipalmente a la producción de madera, las plantaciones de árboles de Navidad y los viveros forestales que se encuentren en bosques y se destinen a las necesidades propias de la explotación. Se incluyen igualmente las superficies cubiertas de árboles o arbustos forestales que ejercen principalmente una función de protección, así como las líneas de árboles que hay fuera de los bosques y los linderos arbolados que por su importancia se considere conveniente incluir en la superficie arbolada.
Tierras para pastos permanentes: son tierras no incluidas en la rotación de cultivos, dedicadas de forma permanente (por un periodo de cinco años o más) a la producción de hierba.
En el periodo 1989-1999 la cantidad de tierras labradas disminuye algo más de un 10% a favor del aumento porcentual de las explotaciones con especies arbóreas forestales y, sobre todo, con las explotaciones dedicadas a pastos permanentes que pasan a constituir el 10% de las explotaciones con tierras en Colmenar de Oreja.

Aprovechamiento de las tierras labradas (Ha.)
Cultivos herbáceos: constituidos por aquellas plantas cuya parte aérea tiene consistencia herbácea. Se consideran los siguientes grupos: cereales para grano, leguminosas para grano, patata, cultivos industriales, cultivos forrajeros, hortalizas, flores y plantas ornamentales, semillas y plántulas destinadas a la venta y otros cultivos. Los semilleros dedicados a utilización de la propia explotación se incluyen en los apartados de los cultivos correspondientes. (En la tabla se incluyen barbechos y huertos familiares).
Como se puede observar en el cuadro, la superficie agraria de Colmenar esta predominantemente dedicada al cultivo de especies herbáceas (trigo), seguido del olivar y del viñedo. El trigo, la vid y el olivo son los cultivos constituyentes de lo que se ha denominado la trilogía mediterránea, que en Colmenar adquiere un protagonismo general.

6.1.4. Formas de explotación.
La significativa ocupación en actividades lucrativas secundarias en los titulares y miembros familiares de las explotaciones en el municipio hablan de una presencia notable de agricultura a tiempo parcial: explotaciones dirigidas al complemento de renta, antiguos agricultores con pequeñas parcelas para autoconsumo o agricultura de ocio.

6.1.5. Tamaño económico de las explotaciones
Una UTA equivale al trabajo que realiza una persona a tiempo completo a lo largo de un año. En el siguiente cuadro se dan las equivalencias entre UTA, jornadas laborales, horas trabajadas y porcentaje del tiempo anual de trabajo de una persona dedicada a tiempo completo:
El incremento en la productividad y rentabilidad de la actividad agraria en Colmenar de Oreja en los últimos 20 años se refleja, como se puede observar en el cuadro, en los índices UTA y SAU, además del margen bruto total sobre el cual no hemos encontrado datos. Las unidades de trabajo año (UTA), que reflejan la intensividad del trabajo sobre la tierra, se han visto incrementadas cerca de un 300% en el periodo 1989-1999; del mismo modo que lo ha hecho, aunque mas contenida, la Superficie Agraria Útil (SAU), indicadora de la presión agrícola sobre el espacio.

6.1.6. Ganadería
7 tipos de ganado se dan el pueblo: caprino, bovino, de aves, porcino, ovino, equino y conejas madres, el número de cabezas de cada una es el siguiente:

El número del ganado ha crecido de 1989 a 1999, este aumento se ha dado en 4 de los 7 tipos de ganado que se dan en el pueblo ( en el de conejas no hay datos de 1989 ), el ganado de porcino ha sufrido un gran retroceso en el número de cabezas pasando de ser el ganado de mayor número ( con gran diferencia ) a ser el cuarto ganado por número de cabezas, mientras los de bovino y avícola han tenido un gran aumento, el aumento del bovino que ha pasado ha ser el de mayor número de cabezas, puede que este en la creación de la denominación de origen de las carnes de vacuno de la Sierra del Guadarrama en 1994, esto habrá hecho que los ganaderos se hayan dedicado más a este sector debido a la mayor facilidad para vender este producto.

EL SISTEMA AGRARIO
Es la forma de utilización del suelo y el conjunto de producciones agrícolas de una explotación o de un espacio agrícola.

6.2.1. Factores que configuran el sistema agrario.
El medio natural: Colmenar de Oreja está situado en la meseta hidrográfica de los ríos Tajo y su afluente el Tajuña, es una zona de relieve suave, la vegetación de la zona destaca por bosques de poca extensión de pinos, encinas y quejigos, con formaciones de tomillares y espartizales.
La presión demográfica en economías cerradas: la evolución demográfica en los últimos 10 años ha sido bastante fuerte pasando en el año 2000 de 5412 habitantes a 8127 habitantes en el 2008.
Las tradiciones: destaca el cultivo de aceite desde la época romana.
La introducción de innovaciones: se encuentra “CTT El Socorro”, que es un centro Vitivinícola para la transferencia tecnológica al sector, sus líneas de actuación son: la experimentación y demostración de las técnicas más avanzadas en el cultivo del viñedo y la elaboración del vino y actividades de formación y divulgación (catas de uvas, catas de vinos, jornadas de puertas abiertas…) y cursos.
También la introducción de nuevos mecanismos para el regadío de los cultivos ligados a la mejora de la mecanización del campo que ha sufrido toda España desde su entrada a la Unión Europea en 1986 y las ayudas provenientes de la PAC.

6.2.2. Elementos que caracterizan del sistema agrario.
El papel de las comunidades agrarias: sistemas colectivos/privados
Rendimientos/hectárea: 2 sistemas:
sistema intensivo: aquel que intenta obtener el máximo rendimiento de la superficie agrícola sometiéndola a un cultivo constante.
Sistema extensivo: es aquél que plantea el uso del espacio de forma alternativa, dejando parte del mismo sin cultivar no necesitando un trabajo continuo de la tierra.
Superficie por tipo de cultivo.
Productividad
Nivel de vida de los agricultores
Monocultivo/ policultivo: la comarca es de policultivo ya que tiene dos especializaciones a destacar, la vid y el olivo.
Monocultivo: especialización en un solo cultivo.
Policultivo: especialización en 2 o más cultivos.
Cuenca de producción: situada en dos cuencas: en las vinícola y olivarera del sureste de Madrid.
Agroindustria:
3 denominaciones de origen:
- Carnes de la Sierra de Guadarrama.
- Vinos de Madrid: en este sector destaca por ser el municipio con mayor número de bodegas, con un total de 8 bodegas.
- Aceites de Madrid: una almazara que es la de la Sociedad Coop. del Campo Santo Cristo.

6.3. EL PAISAJE AGRARIO.

La comarca agraria de las Vegas, donde se localiza Colmenar de Oreja, tiene una tradición agraria muy antigua, por lo que su paisaje rural es producto de la impronta dejada por diversas culturas en distintas etapas históricas. Frente a los paisajes agrarios de reciente producción de las economías agrarias modernas, diseñados con los objetivos de división racional del espacio, sentido de territorio, eficiencia económica, etc., y por tanto, con planos regulares; los paisajes de antigua tradición agraria son más complejos por todo su bagaje histórico y, como es el caso del paisaje agrario de Colmenar, presentan una marcada irregularidad morfológica en el parcelario.


6.3.1. El ager o espacio cultivado.

6.3.1.1. Entramado parcelario: fronteras parcelarias, tamaño de las parcelas, forma y distribución territorial del ager.
Fronteras parcelarias de tipo humano: los límites entre parcelas no tienen elementos físicos que las dividan tales como muros o vallas, lo que hace que sea un paisaje fundamentalmente de openfield o de campos abiertos de lindes difusas, aunque en determinados puntos podamos encontrar límites de tipo vegetal, como pueden ser arbustos, o árboles.
Limites al cultivo de tipo natural: existen algunas pendientes pronunciadas y en ocasiones acarcavadas asociadas a pequeños montes o cerros y a las terrazas fluviales del Tajo; donde no es posible el aprovechamiento de la tierra.

Tamaño de las parcelas: en Colmenar de Oreja predomina la pequeña propiedad o minifundio. El espacio agrario esta muy compartimentado, pero su carácter abierto (en cuanto a las fronteras) no ofrece un paisaje visualmente demasiado atomizado. El gran predominio del minifundio se ha tratado de corregir en las ultimas décadas con procesos de concentración parcelaria, y como se observa en el siguiente cuadro se ha dado una tendencia a la reducción considerable en el numero de explotaciones pequeñas de menos de 10 ha. a favor del aumento de las grandes explotaciones.
Forma de las parcelas (Morfología): En Colmenar de Oreja encontramos mayoritariamente un parcelado irregular. En algún caso podemos encontrar tierras agrícolas ordenadas longitudinalmente siguiendo el curso del rio o de acequias, y puntualmente, parcelas regulares.

Distribución territorial del ager: el arquetipo de paisaje corresponde con los denominados rodales, en el que el terreno forestal queda limitado a pequeños enclaves dentro del marco del espacio cultivado, y puntualmente, sobre todo en el valle del tajo, encontramos tierras dispuestas longitudinalmente.
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6.3.1.2. Tipos de cultivos.
Grandes extensiones de cereal de secano, vides y olivos (trilogía mediterránea) configuran el paisaje de Colmenar de Oreja.


Labor de secano: 3577 Hectáreas
Labor de regadío: 1631 Hectáreas
Pastos y terrenos incultos: 3161 Hectáreas
Olivar: 2314 Hectáreas
Viña: 1077 Hectáreas
Frutales: 1 Hectáreas
Frutos secos: 10 Hectáreas
Especies maderables de crecimiento lento: 449 Hectáreas
Especies maderables de crecimiento rápido: 11 Hectáreas
Otros cultivos: 92 Hectáreas
Encontramos por lo general cultivos mixtos o policultivos, tanto permanentes (vid y olivo) como temporales (cereales de secano), con algunas formaciones de rodales, y algunas menos de calveros, y barbechos. Domina el cultivo de secano frente al de regadío. Este último se concentra junto al Rio Tajo. El resto del territorio ocupado por el ager es una combinación de tierras dedicadas al cereal, a la vid y al olivo. Sin embargo, estos tres cultivos también presentan una cierta concentración individual en algunos espacios del término municipal. Al noreste del núcleo de Colmenar de Oreja se da una importante extensión de cultivo exclusivo de vid. Al suroeste también de Colmenar de Oreja cerca de 15.000 has están dedicadas al cultivo único de cereal. Por ultimo, el sector más occidental del término municipal presenta una mayor especialización territorial en el cultivo del olivo.

6.3.1.3. Posibles relaciones de las características del ager con el medio físico y con los procesos históricos en el territorio.
Se declara de interés general de la Comunidad de Madrid, y por tanto, de utilidad pública e interés social, la transformación económica y social de la zona de la Comarca de Las Vegas, conforme dispone el artículo 92 de la Ley de Reforma y Desarrollo Agrario, de 12 de enero de 1973, y en virtud de lo establecido en el apartado B), Primero, párrafos a) y b) del Anexo I, del Real Decreto 2058/1985, de 9 de octubre, que se llevará a cabo teniendo en cuenta las condiciones de ejecución que se señalen al efecto en el Plan General de Transformación correspondiente. La Zona de actuación comprende los términos municipales, de Ambite, Aranjuez, Belmonte de Tajo, Brea de Tajo, Carabaña, Ciempozuelos, Colmenar de Oreja, Chinchón, Estremera, Fuentidueña de Tajo, Morata de Tajuña, Orusco, Perales de Tajuña, San Martín de la Vega, Tielmes, Titulcia, Valdaracete, Valdelaguna, Villaconejos, Villamanrique de Tajo y Villarejo de Salvanés.
La transformación de la zona consistirá fundamentalmente:
1. Creación de nuevos regadíos y mejora de los existentes.
2. La constitución y ampliación de explotaciones agrarias de características socio-económicas adecuadas.
3. La mejora del medio rural, en orden a la elevación de las condiciones de vida en la Zona y a la integración y promoción social y económica de la población.
4. La redistribución de la propiedad rústica y la concentración parcelaria, que a todos los efectos legales, queda declarada de utilidad pública y urgente ejecución. La Consejería de Economía, conforme al artículo 129 de la Ley de Reforma y Desarrollo Agrario, determinará por Orden, los sectores de la Zona delimitada en el artículo segundo, en que hayan de llevarse a cabo dichas mejoras.
5. El mejor aprovechamiento de los bienes municipales patrimoniales, ya sean de propios o comunales, que se regirá por lo establecido en los artículos 134 al 139, ambos inclusive, de la Ley de Reforma y Desarrollo Agrario.
A los efectos de su mejor aprovechamiento, tendrán el mismo tratamiento que los bienes municipales patrimoniales cualesquiera otros cuya titularidad pertenezca, en pleno dominio, o en uso y aprovechamiento, a la Comunidad de Madrid y sus Organismos Autónomos, y a Comunidades o sociedades de vecinos.
6. La creación y mejora de las industrias de almacenamiento, transformación, comercialización y transporte de productos agrarios, incluidas las actividades artesanas establecidas o que se establezcan en la zona.
7. La promoción y fomento de la formación profesional, investigación y sistema de asesoramiento técnico y económico de las empresas agrarias, estableciéndose la debida coordinación con los organismos competentes en estas materias.
8. La promoción y fomento de Cooperativas, Sociedades Agrarias de Transformación y demás asociaciones de Productores Agrarios.
La extensión superficial de la zona descrita es, aproximadamente, de 130.000 hectáreas.
La Planificación de las actuaciones se concretará en el Plan General de Transformación, que incluirá orientaciones productivas, ayudas en base a la normativa y el marco del Real Decreto 1887/1991, sobre mejora de las estructuras agrarias y demás disposiciones aplicables en la materia, sistemas de riego, actividades que deban fomentarse, mejoras territoriales que se estiman necesarias para el aprovechamiento adecuado de los recursos y las condiciones técnicas, económicas y administrativas para la ejecución de las diversas actuaciones programadas.

6.3.2. El saltus o espacio no cultivado (bosques, pastizales y prados).
6.3.2.1. Extensión del saltus.
La parte no cultivada de este término comprende montes, cerros, barrancos y prados o valles con una extensión de 3.846 hectáreas. Las principales aéreas forestales con aprovechamiento económico están pobladas por bosques de coníferas y frondosas asociadas generalmente a pequeños montes.

6.3.2.1. Morfología.
Abundan las masas de árboles de poca densidad, de de pinos, encina y quejigo también otras de más densidad, presumiblemente de repoblación, por las formas que se generan. También encontramos la rica vegetación autóctona de estrato sub-arbustivo, con formaciones de tomillares, espartizales, salvia, espliego, etc.… En los cauces del río encontramos chopos, sauces y olmos. Por otro lado también destaca las superficies pertenecientes a cerros y monte bajo, donde no se cultiva.
Destacan los siguientes espacios naturales: Carrizales y sotos de Aranjuez, Mar de Ontigola, Yesares de Aranjuez y el Pinar de la Encomienda Mayor de Castilla.
Dentro del saltus encontramos también las canteras de calizas, muy importantes para la economía de Colmenar.


6.3.3. Hábitat y poblamiento.

6.3.3.1. Tipo de hábitat.
-Se puede distinguir entre:
a) hábitat disperso
b) hábitat concentrado

En Colmenar encontramos un hábitat concentrado. Los asentamientos se constituyen en pueblos, produciéndose una gran diferencia de densidad poblacional entre estos y los espacios de explotación. La proliferación reciente de urbanizaciones dentro del término (que se añaden al ya existente núcleo de Colmenar de Oreja) como asentamiento concentrados consolida este tipo de poblamiento propio de regiones llanas con fácil comunicación por tierra.
Destacan los núcleos poblacionales de: Balcón del Tajo, Los Vallejos, y el núcleo principal de Colmenar de Oreja.

El tipo de urbanización difiere entre Colmenar de Oreja y los núcleos de reciente construcción. El pueblo de Colmenar, debió a su antigüedad, muestra un paisaje y una morfología típicamente rural: trama urbana irregular y mayor densidad edificatoria. Los núcleos nuevos presentan una estructura de urbanización moderna típica, con viviendas unifamiliares aisladas o pareadas, menor densidad edificatoria y mejor calidad de vivienda.


6.3.3.2. Emplazamiento de los núcleos.
Colmenar de oreja se emplaza sobre un relieve llano, a pies de una extensa área de paramos y mesas estructurales calcáreas. El Balcón del Tajo y Los Vallejos, los otros núcleos principales, se emplazan sobre una terraza fluvial que domina sobre el valle fluvial del Rio Tajo.

6.3.4. Red de caminos, transportes y vías pecuarias.
El paisaje agrario está articulado mediante caminos, carreteras, vías pecuarias, senderos y otras arterias de comunicación.
Las carreteras presentan una estructura radial dentro del término en torno al núcleo de Colmenar de Oreja. Esta disposición radial de las carreteras se ve parcialmente paliada por la situación excéntrica de Colmenar dentro del territorio del municipio. Se trata de una red viaria heredada, en la que Colmenar, como único núcleo existente en el pasado, constituye el puno de parida de las vías que comunican el municipio con los municipios vecinos.

Carreteras que articulan el municipio
Los caminos y senderos discurren mayoritariamente entre las parcelas y las explotaciones, coincidiendo así con las lindes y limites de as unidades de explotación agrícola, posibilitando los distintos tipos de flujos originados por la actividad agrícola, ganadera y forestal.
A continuación se muestran las vías pecuarias que transcurren por el interior del municipio:

7. CONCLUSIONES
Según los datos que hemos recogido sobre el municipio de Colmenar de Oreja, nuestra conclusión es que se trata de un espacio periurbano debido a:

Colmenar de Oreja ha experimentado en los últimos 10 años un crecimiento espectacular de su población debido sobre todo a las inmigraciones interiores procedentes de la metrópoli madrileña y también por la inmigración extranjera.
Estos procesos inmigratorios son a consecuencia de una buena conexión de Colmenar de Oreja con respecto a la capital, precios del suelo más baratos y búsqueda de mayor calidad ambiental por parte de la población. Esto ha consolidado a Colmenar de Oreja como un área de esparcimiento y de segundas residencias, y también como ciudad dormitorio dado el volumen de población que vive permanentemente en Colmenar pero se traslada a trabajar a Madrid.
En este sentido, las dos urbanizaciones que se ubican en el municipio se realizaron tan sólo hace 20 años, lo cual también ha creado trabajo en la construcción atrayendo a población inmigrante con mayor porcentaje de extranjeros. Al aumento del protagonismo del suelo urbano residencial también se acompaña una disminución de la superficie productiva agraria.
Todos estos procesos no se podrían explicar sin la proximidad del municipio con respecto a la metrópoli madrileña que tiene una dinámica expansiva. Así que se entienden como elementos de presión o influencia de Madrid sobre el municipio de Colmenar. De modo que podríamos, en función de los aspectos antes citados enmarcar nuestro municipio dentro de una tipología de espacio rural periurbano.
Otros aspectos de la realidad económica y social del municipio nos acercan a otro tipo de espacio rural. El desarrollo de las denominaciones de origen, la pertenencia a dos tipos de cuencas de productividad y la expansión de las actividades económicas terciarias vinculadas al turismo rural permiten al municipio de colmenar acceder a un desarrollo endógeno o de base local, lo cual le acercaría hacia la tipología de medio rural tradicional pero con acceso al desarrollo, con una agricultura en expansión y con tendencia a la especialización productiva.
A esto a contribuido la llegada de los denominados “neorrurales” a Colmenar de Oreja, los cuales han aportado conocimientos de nuevas técnicas agrarias y han ayudado a la promoción de los productos agroindustriales para que sean conocidos a nivel mundial a través de las nuevas tecnologías de la comunicación, como es Internet.

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